Esa es tu identidad, tu forma de ver el mundo, tu identidad no es lo que dicen de ti, sino lo que sabes de ti.

Las identidades son históricas, cambian en el tiempo y se construyen a partir de las experiencias.

Ninguna identidad es perfecta, todas tienen sus luces y sus sombras.

Las identidades se adaptan a las situaciones, pero siempre permanecen en el fondo.

Las identidades se pueden transformar, pero nunca desaparecen.

 

Frases con la palabra identidad.

 

Para construir nuestra identidad, es necesario explorar nuestras raíces y descubrir nuestro pasado, para ser parte de una felicidad.

Encontrar nuestra identidad es como un viaje, no es un destino final, sino un camino que recorremos a lo largo de nuestra vida.

Nuestra identidad no es una posesión que debemos proteger, sino un don que debemos compartir.

Las personas son únicas e irrepetibles, cada una tiene una identidad propia que la hace ser quien es, por eso es importante defender nuestra identidad y mostrarla al mundo.

Nadie puede arrebatarnos nuestra identidad, la que construimos con dignidad y esfuerzo, cuando se nos arrebata nuestra identidad, se nos quita el sentido de pertenencia a la vida.

Las personas que están en posesión de su identidad son las más seguras de sí mismas.

No hay que confundir identidad con pertenencia, la identidad es lo que somos, la pertenencia es a quién pertenecemos.

La identidad se construye a partir de las experiencias que vivimos y de las cosas que nos importan.

Una persona es el resultado de todas las experiencias que tiene a lo largo de su vida, cada momento es único e irrepetible, por eso cada persona es irrepetible.

Las personas que descubren y mantienen una clara identidad propia a través de los años son las más afortunadas.

Tu identidad es tu sueño, tu esperanza y tu pasado, es única e irrepetible, nunca dejes que nadie la limite.

Tú eres único, y eso es una bendición, tener identidad propia es el mejor regalo que podemos darle a nosotros mismos.

Tu identidad no se basa en lo que otros piensen de ti, sino en quién eres realmente.

No importa quién seas o qué hayas hecho en el pasado, siempre puedes reinventarte a ti mismo.

Nunca dejes de ser tú mismo, pues en ti reside la única identidad que podrás llevar con orgullo.

Una persona siempre tiene que reconocerse a sí misma, respetarse y aceptarse tal cual es, tener identidad para poder ser feliz.

Nunca dejes que nadie te quite la identidad que eligiste para ti mismo, tú eres único y especial, no importa lo que otros digan o piensen.

Las personas son lo que son por su identidad y lo que ésta representa para ellas.

Nuestra identidad no viene determinada por nuestro pasado, sino por nuestro compromiso con el futuro.

No importa quién seas, sino a quién perteneces, mi identidad no está definida por lo que soy, sino por lo que puedo llegar a ser.

Tu identidad es lo que te hace ser quién eres, trata de ser fiel a ti misma y a tu identidad, porque eso es lo que te hará feliz.

Las personas tienen múltiples facetas, y a veces es difícil definirnos por una sola, pero a pesar de todas nuestras diferencias, hay algo que nos identifica: nuestra identidad.

Solo siendo nosotros mismos podremos ser felices. por eso, no debemos avergonzarnos de nuestra identidad ni de nuestro pasado, sino estar orgullosos de ellos.

Mientras mantengas tus principios y tu identidad, nadie podrá quitártelas, todo el mundo tiene derecho a sentirse orgulloso de sí mismo, independientemente de quién seas.

No podemos elegir nuestro origen, ni nuestro pasado, ni quienes somos ante los demás, pero sí podemos elegir nuestro futuro, nuestro presente, nuestra identidad, quiénes queremos ser.