SENSACIONALES Frases para decir no al BULLYING.

Creo en tratar a los demás con respeto y amabilidad, por lo que no puedo tolerar ni participar en la intimidación.

Valoro la diversidad y las diferencias que nos hacen únicos, y el bullying va en contra de ese principio, así que tengo que decir que no.

Estoy comprometido a crear un ambiente seguro e inclusivo y no hay lugar para la intimidación en esta visión.

Me niego a quedarme al margen y permitir que otros sean maltratados o intimidados, así que hablaré y diré que no.

Creo que puedo usar mi voz y mis acciones para generar un impacto positivo, lo que significa luchar contra el acoso escolar.

Frases para decir no al bullying.

Soy consciente de los efectos perjudiciales que tiene el acoso sobre las personas y las comunidades, y no quiero contribuir a ese daño.

No me interesa el comportamiento que dañe a los demás o socave su autoestima, por lo que me abstendré de intimidar.

Me niego a participar en actividades que perpetúan el odio y la intolerancia, incluida la intimidación.

Valoro el bienestar mental y emocional de mí mismo y de los demás, y la intimidación socava eso, así que tendré que negarme.

Estoy comprometido a crear una comunidad donde todos se sientan seguros, valorados y respetados, y la intimidación va en contra de ese objetivo.

Soy consciente del impacto negativo que tiene el bullying en la salud mental y la autoestima, y ​​no quiero contribuir a este daño.

Creo en la construcción de una cultura de amabilidad y empatía, lo que significa hacer frente al acoso.

Me niego a ser un espectador y permitir que ocurra la intimidación, así que hablaré y diré que no.

Creo en el poder de la positividad y de inspirar a otros, lo que significa no involucrarse en la intimidación.

Aprecio la diversidad y la contribución de cada persona, y el bullying socava esto, así que tendré que negarme.

Estoy comprometido a crear un mundo donde todos se sientan escuchados, valorados y respetados, y el acoso va en contra de esa visión.

Creo en promover una cultura de respeto y comprensión, y el bullying va en contra de ese principio, así que tengo que decir que no.

No me interesa el comportamiento que hiere a los demás y los hace sentir impotentes, por lo que me niego a intimidar.

Creo en usar mi voz para proteger a los demás y promover la positividad, lo que significa decir no al acoso.

Me niego a involucrarme en un comportamiento que haga que los demás se sientan indignos o inferiores, y la intimidación hace precisamente eso, así que tendré que negarme.

Valoro la amabilidad y la empatía, lo que significa resistir el acoso y alentar las interacciones positivas.

Soy consciente de que el acoso puede causar daños emocionales y psicológicos a largo plazo y no quiero contribuir a ese daño.

Estoy comprometida con la construcción de una comunidad segura e inclusiva, y la intimidación va en contra de ese objetivo, así que tendré que decir que no.

Creo que uno debe tratar a los demás con dignidad y respeto, y la intimidación va en contra de este principio, así que tendré que negarme.

No estoy interesado en el comportamiento que socava el bienestar y la autoestima de los demás, por lo que me abstendré de intimidar.

Aprecio las cualidades y perspectivas únicas que cada persona aporta, y la intimidación socava esa diversidad, así que tendré que rechazarla.

No toleraré ninguna forma de intimidación y me protegeré a mí mismo y a los demás que sean víctimas.

Creo que uno debe tratar a los demás con amabilidad y respeto, y el bullying va en contra de esos valores.

Tengo la responsabilidad conmigo mismo y con los demás de crear un entorno seguro y de apoyo, lo que significa que no hay intimidación.

Soy consciente del impacto negativo que tiene el acoso en la salud mental y el bienestar de alguien, y me niego a contribuir a ese daño.

Creo en el poder de la positividad y la capacidad de animar a los demás en lugar de humillarlos con la intimidación.

Me comprometo a ser un aliado de aquellos que están siendo intimidados y oponerme a este comportamiento dañino.

Me niego a participar en cualquier comportamiento que perpetúe el ciclo de violencia y negatividad, incluida la intimidación.